La situación del Alcázar de Segovia, sobre una roca labrada por los ríos Eresma y Clamores, indica el origen militar de esta fortaleza durante siglos inexpugnable.
Este espacio está ubicado en el Jardín de Delibes, en la Muralla Norte. Se trata de un bello rincón en el que las palabras y los árboles comparten protagonismo.