Nuestras arenas son los ríos...
Las arenas silíceas que se encuentran en muchos lugares de la ciudad de Segovia han sido empleadas desde hace siglos como material de construcción y hasta como materia prima para fabricación del vidrio. Lo que muy poca gente sabe es que, por increíble que parezca, fueron depositadas en el lecho de anchos ríos entrelazados que circulaban por este territorio hace unos 90 millones de años. En las inmediaciones del paraje del Terminillo, donde el término municipal de Segovia limita con el de La Lastrilla, antiguas areneras que explotaron estos materiales permiten ver los bancos de arenas silíceas, gravas y arcillas; las estructuras sedimentarias que se formaron en las orillas, barras, islas y dunas que movía la corriente fluvial; y hasta costras de óxidos de hierro que formaron los suelos en un clima subecuatorial.
Pero además, podréis reflexionar sobre aspectos ambientales, como los impactos asociados a la explotación de los recursos minerales y la necesidad de la restauración paisajística; los cambios climáticos globales; el coleccionismo de minerales y la conservación de patrimonio geológico; y los riesgos geológicos inducidos tras la explotación minera.