Este yacimiento fue descubierto y excavado oficialmente en sucesivas campañas en la década de 1950. La necrópolis de Madrona está clasificada como la segunda más valiosa de España tras la de Duratón, también en la provincia de Segovia.
Su transcendencia se debe no sólo al número de sepulturas estudiadas, unas 350, y al material de ellas obtenido, sino a las muchas que aún esperan intactas en esta zona. No se sabe con certeza el lugar donde se encontraba el poblado, aunque sí se da por seguro que apenas dista doscientos metros de su necrópolis.