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Comenzamos este paseo en la Pradera de San Marcos, donde finaliza el valle del Clamores (también puede hacerse al contrario, desde el Acueducto, comenzando en las proximidades del Barrio de San Lorenzo).

Frente a esta inmensa y verde explanada se encuentra el santuario de la Fuencisla, custodiado por tilos, chopos, arces, almeces y algún haya, y el convento fundado por San Juan de la Cruz, donde crecen almendros y cipreses. 

Castaños, fresnos, gleditchias o acacias nos acompañarán en nuestro camino junto al río. Pasando bajo la Puente Castellana llegamos a la Casa de Moneda, cuya construcción, en 1583, se debe a Felipe II. El complejo se levantó sobre lo que fue un molino de papel. Desde este lugar parte la Alameda del Parral, primer paseo arbolado público de la ciudad, construido con motivo de las visitas de Felipe II al Real Ingenio de la Moneda. 

En esta zona del valle se establecieron varias órdenes monásticas atraídas sin duda por la belleza, la calma del lugar y la presencia de importantes manantiales; de ahí el dicho “De los huertos al Parral, paraíso terrenal”.

Desde el puente de la presa de la Casa de Moneda descubrimos el Monasterio del Parral, en el que habitan los últimos monjes jerónimos y cuya torre es la única torre renacentista de la ciudad. 

Volvemos de nuevo al río, a cuyas orillas crecen salicarias o frailecillos, hierba mora, dulcamaras y pimientas acuáticas. 

Una zona de huertas, que en su día abastecían la ciudad, se extiende desde la Casa de Moneda hasta el monasterio de San Vicente el Real. Párate en el puente de los Huertos para apreciar las torres del Convento de Santa Cruz la Real, fundado por los Reyes Católicos y sede actual de IE Universidad. 

Pronto llegaremos a la antigua fábrica de borra y, unos pocos metros más adelante, encontraremos restos de varios molinos, testimonio del pasado industrial del valle (Senda de los Molinos). Entramos ya en el barrio de San Lorenzo por el puente que cruza el Eresma junto a la antigua fábrica de borra. Este pequeño barrio aún mantiene el encanto rural y medieval gracias a su iglesia románica y sus casas construidas con entramados de madera y ladrillo. Desde la calle de los molinos se alcanza esta plaza. Y cruzándola, volveremos al Acueducto por Vía Roma para completar este paseo. 

  • Punto inicio: pradera de San Marcos 
  • Punto final: Acueducto 
  • Duración: 1 hora 
  • Distancia: 3 km 
  • Dificultad: baja 
  • Accesibilidad: alta 
  • No hay posibilidad de realizar esta ruta en bicicleta

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